1. RETINOL: EL RENOVADOR NOCTURNO
El retinol, una forma de vitamina A, es reconocido por su capacidad para estimular la renovación celular y promover la producción de colágeno. Ayuda a reducir arrugas, las líneas de expresión, mejora la textura, ayuda con el acné. Es sin duda el ingrediente más estudiado desde los años 50. RETINOL, no derivados ni con apellidos (con menos estudios o con menos eficacia).
2. PÉPTIDOS: LOS MENSAJEROS DE LA FIRMEZA
Los péptidos son cadenas cortas de aminoácidos que actúan como mensajeros en la piel, mandando señales a las ‘células constructoras’ para producir ‘materiales de construcción’ de tu piel. Hay de muchos tipos, tamaños y funciones… y para ser honestos tienen más evidencia de funcionamiento in vitro (con cultivos de piel hechos en laboratorio) que in vivo (con personas reales).
3. ANTIOXIDANTES: LOS ESCUDOS CONTRA EL ENVEJECIMIENTO
Los antioxidantes, protegen la piel de los radicales libres generados por factores externos como la radiación UV y la contaminación. Estos radicales libres pueden dañar las células de la piel y acelerar el envejecimiento. Al aplicar antioxidantes tópicos, se neutralizan estos radicales, previniendo el daño celular.
4. PROTECTOR SOLAR: EL GUARDIÁN DIARIO
La exposición al sol es LA principal causa del envejecimiento prematuro de la piel. Los rayos UV dañan las fibras de colágeno y elastina, provocando arrugas y manchas. El uso diario de protector solar protege la piel de estos daños. Llegará el momento donde la crema solar sea como tener distintos cubos de basura en casa o no fumar en espacios cerrados; primero impuesto por ley… y luego no entendible para el común de los mortales el cómo vivíamos antes de incorporarlo a nuestro día a día.